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Llevábamos varios meses detrás de esta podenquita.
Deambulaba por la autovía cerca del Hospital y nuestro temor era que algún coche la atropellase, ya que se cruzaba de un lado a otro de la calzada.
Hicimos un ritual de comida para que confiase en nosotros y así poder salvarle la vida.
Viene en condiciones lamentables, cuajada de pulgas y garrapatas, baja de peso y con algunos cortes.
Pero…¡Ya está con nosotros! La hemos bautizado TIERRA, y es todo lo contrario a lo que nos ha hecho creer, es una perrita muy dulce, simpática y amorosa, solo que estaba aterrada y huía por miedo.
La hemos bañado y desparasitado, y estamos a la espera de los resultados de la analítica.
Queremos agradecer con MAYÚSCULAS a todas las personas que se han preocupado por este caso y se han acercado a nuestras instalaciones a dar el aviso, o nos han mandado videos para darnos la ubicación exacta de su posición.
A algunos componentes del HOSPITAL TIERRA DE BARROS que le ponían comida y agua y cuidaban de ella.
A mi equipo por estar siempre dónde más se le necesita, por y para ellos.
Y por supuesto a nuestro lacero municipal BERNARDO que sin el nada hubiese sido igual ¡Gracias amigo!
BIENVENIDA, TIERRA, A NUESTRA GRAN FAMILIA.