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La concejal de Servicios Sociales, Isabel Ballesteros, ha comentado que Almendralejo cuenta con número importante de refugiados que están adaptados a la vida de la ciudad. En su mayoría tienen trabajos y viven de forma independizada, aunque al legar a la ciudad estuvieron alojados en domicilios de familiares.
En cuanto a lo más próximo, la llegada de ucranianos, Ballesteros ha comentado que habrá en torno a 20 personas. Son nueve menores de unas cinco familias. Tras su llegada a la Capital de Tierra de Barros, comenzaron a compartir vivienda con familiares pero tras ponerse a trabajar, han logrado independizarse. Eso ha sido posible gracias a la predisposición de los empresarios locales, como el Grupo Maven e Hijos, en el que trabaja desde su llegada un mecánico.
Además, decía la concejal de Servicios Sociales, hay personas cubanas, en concreto dos familias, y una venezolana. A ellos se le suman algunas personas de nacionalidad brasileña.